Sobre mi
Hola, soy Marta López Guillamont
Después de un largo camino, he llegado hasta aquí.
Soy valenciana y estudié Derecho, me licencié, y cuando estaba en tercero de carrera decidí compaginar el derecho con la moda y me vine a Madrid un año a estudiar un Máster en el Instituto Europeo de Diseño (IED)
Cuando regresé a Valencia empecé a trabajar en el Departamento de Moda, como editora, en una revista de Valencia, con compañeras estupendas donde aprendí mucho y desarrollé mi creatividad y mi pasión por la moda sin dejar el mundo del Derecho, al que se dedica mi padre y es su pasión, y, al que estoy muy agradecida porque me ha brindado muchos conocimientos.
Siempre he tenido un lado artístico y sensible, supongo motivado por mi madre, bailarina de ballet clásico y profesora de la Royal Academy of Dance de Londres, con un gusto y una sensibilidad exquisitas.
Desde pequeña he hecho ballet y he visto a mi madre trabajar su cuerpo día a día y ser feliz viendo la evolución de sus alumnas, al igual que mi padre que también se dedica a la docencia en el mundo del derecho.
Empecé a descubrir el yoga hace veinte años practicándolo e investigando hasta que encontré a Sabrina, una profesora que me marcó y me hizo entender el yoga desde su esencia más profunda.
A partir de ese momento, decidí sumergirme en el mundo del yoga, practicar con regularidad y buscar a las mejores profesionales.
Entretanto, continué trabajando en el ámbito jurídico compatibilizándolo con el estudio y la práctica del yoga, pero conforme más me adentraba en el yoga más percibía que ese era mi espacio y que disfrutaba aprendiendo
Así que decidí formarme, estudiar y esforzarme hasta conseguir sacarme el título de Instructora de Yoga. A partir de ahí, fui a por todas, y seguí estudiando y formándome, hasta que obtuve el título de Profesora de Yoga de la Yoga Alliance, muy motivada por Lucia Liencres, una persona a la que admiro y me abrió los ojos y a la que estoy muy agradecida.
La vida me trajo a Madrid, y en ese momento fue cuando decidí que quería enseñar y que conocieran el Yoga, empecé a dar clases de yoga particulares a alumnas en Madrid y enseguida me di cuenta que servía para esto, que a la gente le gustaba mis clases y que cada vez me sentía más segura dándolas, así que un día vencí el vértigo, abandoné la seguridad de mi trabajo jurídico para dedicarme a mi pasión y a lo que quiero ser y decidí abrir Can yoga en Ibiza y desde septiembre, Can yoga en Madrid.
El yoga es mi camino, me aporta muchas cosas buenas y es un camino largo en el que nunca dejas de aprender, donde tienes que ser humilde, constante y responsable. Camino que exige una constante dedicación y respetuosa actitud con tus alumnos.
Para mi es una responsabilidad tremenda porque estoy tratando con su cuerpo, su mente, sus emociones y al tenerlos enfrente, doy todo para acompañar a mis alumnos a evolucionar, a descubrir su potencial, a tratarse con respeto, a tener paciencia y a esforzarse con cariño y lo que más satisfacción me da es tener alumnos leales y ver como cada día van entendiendo el yoga desde lo más profundo y como respetan los tiempos que les pide su cuerpo y su mente.
Soy una profesora feliz que sigue aprendiendo cada día de sus alumnos y de las mejores profesoras y doy gracias por poder dedicarme a lo que me apasiona.
